jueves, 30 de junio de 2011

Apuntes sobre Arolas y su tiempo por Ricardo García Blaya


Arolas es un artista genial y misterioso, muy difícil de comprender sin ponerlo en el contexto histórico y cultural del fin de siglo.
Testimonio indubitable de la importancia del inmigrante en la construcción del tango. Es el representante más genuino del romanticismo y del modernismo de la "belle epoque" tanto por su genio creativo como por su vida y su muerte.
Esta breve y sencilla descripción histórica pretende colocar al personaje en el marco político y social de la época, que nos permita comprender mejor sus talentos y contradicciones, su genialidad y personalidad autodestructiva.
En cuanto al proceso evolutivo del artista remito al lector a los excelentes trabajos de Héctor Ernié (La historia del tango, Vol. 5, Ed. Corregidor) y de Oscar Zucchi (El tango, el Bandoneón y sus intérpretes, Ed. Corregidor) Solo me interesa destacar su ductilidad musical, que permitió a nuestro protagonista pasar de la guitarra al bandoneón con una facilidad y velocidad increíble.
Este enamoramiento entre el instrumento y el artista originó no sólo un notable ejecutante y compositor, sino un brillante director que modificó en fuerza y en brillo lo que se escuchaba en otras formaciones de su tiempo. "Fue un refucilo, un relámpago, un estruendo que conmocionó a toda una generación de excelentes músicos que lo siguieron" (Jorge Göttling, diario Clarín, 29/9/1994).
En efecto, Arolas hizo cosas que hoy consideramos modernidades y sin embargo ya estaban en el fraseo y canto de su bandoneón.
En el año 1890, procedente de Francia, arribó a la ciudad de Buenos Aires el matrimonio de Enrique Arola y Margarita Saury con su hijo José Enrique.
Nuestra historia nos enseña que no se trataba de un año cualquiera.
"La iniciación del 90 encontró al país es estado de quiebra y de liquidación forzosa y con una revolución clamando en las calles" (Ernesto Palacio, Historia de la Argentina).
Durante su transcurso vivieron sucesivamente, una revolución, la renuncia de un presidente y el nacimiento del partido político llamado a representar el espíritu revolucionario y popular de aquel entonces: la Unión Cívica.
Un país de paradojas, basado en un modelo autoritario y liberal, abierto a la inmigración y al progreso, pero con un sistema corrupto y fraudulento.
En este contexto se instaló la familia Arola, en el barrio de Barracas, Salta 3378 (actual Vieytes 1048), y allí nació dos años más tarde el protagonista de esta crónica, Lorenzo Arola, el 24 de febrero.
Mientras transcurre su niñez, los Arola mudaron de vivienda varias veces pero nunca se fueron de Barracas, el barrio que vio crecer al "Pibe de Barracas".
En dicho lapso la República vivió una solapada guerra civil que cada tanto se expresaba en forma violenta; baste recordar las revoluciones de 1893 y de 1905.
No obstante esto, el país se recuperaba de la crisis económica del 90 y comenzaba a vislumbrarse un escenario próspero y pacificado, que se instala finalmente en el año del Centenario cuando asume la presidencia Roque Sáenz Peña durante la cual se promulga la ley del Sufragio Universal (1912).
Efectivamente el Centenario con sus festejos y la instalación de una nueva realidad política, genera un clima de bienestar y distensión propio de la mencionada "belle epoque".
La Argentina era "el granero del mundo", la Unión Cívica Radical accedía al gobierno con Yrigoyen y el tango gobernaba en la orilla y en el centro.
Nuestro artista tenía la melodía en la cabeza, era elegante y compadrón y la vida le ofrecía solo alegrías en esa década del 10 donde el 17 de enero de 1913 con motivo de tramitar su documento, rectifica su nombre y apellido y pasa a ser Eduardo Arolas.
Cuando Lorenzo pasó a ser Eduardo, "El Pibe de Barracas" pasó a ser, sin saberlo, "El Tigre del Bandoneón".
Es el momento de esplendor, donde de su corazón bohemio surgieron más de cien músicas, aunque sólo llegaron al disco unas treinta de ellas, estamos ya en presencia del más grande compositor de nuestro género ciudadano.
El tango comenzaba sus incursiones a París y la muchachada aristocrática flirteaba con músicos y personajes arrabaleros, generando un mundo donde convivían compadritos y bacanes.
La noche, las mujeres y el permanente deambular por cafés y prostíbulos, el éxito, la fama y una adolescencia apresurada generaron la idea a nuestro protagonista que la vida era una farra interminable.
No le preocupaba que a partir de la caída de Bismarck, Europa se preparaba para la guerra; que España iba perdiendo inexorablemente sus colonias y que Buenos Aires se multiplicaba demográficamente con la expulsión de miles de hombres y mujeres del viejo mundo.
La inmigración se interrumpe en 1914, a partir del estallido de la Primera Guerra Mundial por el asesinato del Archiduque Fernando en Sarajevo, que ensangrentó Europa durante cuatro años. Como resultado de la conflagración se consolida el régimen democrático en la Europa Occidental y, en el oriente la revolución de los soviets termina con el imperio de los zares.
Arolas siguió con interés los sucesos del viejo mundo pues como todo tanguero porteño soñaba duplicar su éxito en París, viaje que al final realiza en 1920.
Una circunstancia inesperada es el principio de su romántico final: la traición de la mujer que amaba, nada menos que con su hermano mayor.
"Hombre varonil y de rebuscada elegancia, no tuvo suerte de ser amado por la mujer que eligió. Con ella hubiera resistido huracanes. Sin ella sentía que una tenue brisa podía derribarlo" (José Narosky, diario Clarín, 28/1/1992).
El alcohol, la vida desenfrenada y un oscuro episodio en Montevideo, donde Arolas atropelló un chico con su automóvil, harían el resto.
Cuando viaja por última vez a París, era un hombre terminado, paradójicamente con una buena posición económica pero vencido por la bebida y la tristeza.
Murió solo en el hospital Municipal de París, tenía 32 años, y el certificado, por error, decía tuberculosis, pero todos sabían que fue de pena.
Su muerte se produjo el 29 de setiembre de 1924, plena presidencia de Marcelo T. de Alvear y sus restos fueron repatriados treinta años después, en la segunda presidencia del general Perón. 
EDUARDO AROLAS (El tigre del bandoneón)

 


Hablar de Eduardo Arolas es meterse en el misticismo de la historia de nuestra música ciudadana.-
Recordar a Arolas, es volver a vivir una época de lirismo, de sueños, de barrios olvidados, de personajes ya no existentes que ya nunca volverán a repetirse, de melancolía, de nostalgia, de todo aquello que forjó nuestra identidad nacional.-
Eduardo Arolas nació y se crió en el barrio de Barracas, en ese entonces barrio de corralones, cuartedores, carreros, guapos y compadrones. Por eso así fue su carácter, su forma de ser, su estilo de vida, igual que la mayoría de la gente que lo rodeó en su infancia y su adolesencia.-
Fué a mi entender, uno de los más grandes compositores de música tanguera de todos los tiempos, y tal vez podamos decir que fué el padre e inspirador de todos los compositores que aparecieron después en el firmamento de la música de tango. Porque tengamos en cuenta que a pesar de su corta vida, murió cuando solo contaba 32 años de edad, llegó a componer alrededor de un centenar de tangos y valses todos ellos de una calidad indescriptible.-
Comienza su vida artística tocando la guitarra en un dúo que forma con el bandoneonista Ricardo González “Muchila” cuando contaba tan sólo con 12 años de edad. Pero dos años más tarde cambia la guitarra por el bandoneón, aunque lo tocaba sin conocer una sola nota musical. Es por esa época que se le despierta el alma de compositor, y escribe su primer tango sin tener, el más mínimo conocimiento de música, y a ese tango le pone el nombre de “Una noche de garufa”.-
Es tan grande la labor que desarrolla como bandoneonista, que se deside a tomar clases de teoría, solfeo y armonía con el profesor José Bombig, que en ese tiempo dirigía la banda de la Penitenciaría Nacional.-
En aquella éra muy común tocar un tiempo con un conjunto musical y otro tiempo con otra agrupación, pues el trabajo de músico se sabía cuando empezaba, pero no se sabía cuando terminaba...
Así lo vemos a Arolas formar un trío el pianista Agustín Bardi y el violinista Tito Rocatagliatta y al año siguiente intervenir en un concurso con el mismo violinista pero con Roberto Firpo al piano. Dicho consurso se realizó en el cabaret Armenonville, y fue ganado por los susodichos, pero desgraciadamente la cosa no terminó muy bien porque uno de los integrantes del conjunto que entró segundo en dicho concurso le propinó una puñalada en la espalda a Roberto Firpo, mandándolo al hospital.-
Cuatro años después, estoy hablando de 1917, Firpo lo convoca a Arolas a tocar en la orquesta de Canaro-Firpo, para cubrir los bailes de carnaval en el teatro Colon de la ciudad de Rosario.-
En el año 1920 se va a vivir a París, para reiniciar una nueva vida, pues había tenido con grave problema sentimental con la mujer a quien realmente amó, y como si esto fuera la letra de un tango, ella al fin lo abandonó, para irse nada más ni nada menos, no con su mejor amigo, pero, sí, con su hermano mayor.-
Luego regresa por un corto tiempo a Bs. As., intercalando sus actuacioenes entre Bs. As. y Montevideo donde actúa con gran éxito en el teatro Casino de Montevideo, en el cual estrena su famoso tango “La Cachila”.-
Su obra musical fué realmente asombrosa teniendo en cuenta la calidad y el tiempo en que la realizó.-
Además de “Una noche de garufa” y “La Cachila”, se destacan “El Marne”, tango dedicado a las tropas francesas que pelearon en la batalla de ese nombre en la primera Guerra mundial, “Derecho Viejo”, tango dedicado al centro de estudiantes de derecho, el tango “Catamarca” interpretado maravillosamente por Carlos DiSarli,, “La Guitarrita” “Retintín” “Comme il fault”, “Fuegos artificiales”, “La trilla” “Rawson”, “Place pigall”, “Suipacha”, y muchos más que fueron hechos delicias musicales por las orquestas de Juan D’Arienzo, Carlos DiSarli, Osvaldo Pugliese, Aniíbal Troilo, Francisco Canaro, Roberto Firpo y muchas más..-
El 29 de setiembre de 1924, muere en el Hospital Bichat de París, de tuberculosis pulmonar, según reza el informe del citado nosocomio. Pero parece que Arolas murió asesinado por unos delincuentes que quisieron cobrar con sangre, alguna cuenta pendiente de Arolas con el “hampa” francés.-
Su amigo Enrique Cadícamo, estuvo averiguando bien como fué la cosa, escribió estos versos a título informativo: En esta calleja sola/// y amasijao de sorpresa/// fué que murió Eduardo Arolas///por robarse una francesa.///
Con Eduardo Arolas, se fué un personaje del ambiente nocturno de París, Bs. As. y Montevideo. Su fama de Don Juan, guapo, elegante y cafiolo, se extendió a las tres ciudades que habitó indistintamente. Usaba botines con caña, por supuesto de charol, camisa de puño bordado de Bruselas, sus dedos adornados con brillantes, (bien al estilo canfinflero), “chambergo” o “rancho” según la época del año .-
Pero no olvidemos que si bien con su pinta conquistó el corazón de las mujeres de la noche, con su música y su bandoneón se ganó el alma de todos los amantes de la lírica tanguera.


miércoles, 29 de junio de 2011

GARDEL Y CORSINI MANO A MANO


Se conocieron en 1913, y desde ese momento se admiraron mutuamente. Carlos Gardel e Ignacio Corsini, los dos máximos cultores de la canción porteña, forjaron una sólida amistad que sólo truncó la muerte del "Zorzal". Aquel primer encuentro fue en una fonda de Bahía Blanca: Gardel estaba de gira con Francisco Martino, Saúl Salinas y José Razzano, en tanto que Corsini recorría pueblos con el circo Cassano. Ambos concluyeron aquella tenida cantando. Entre 1930 y 1931 convergieron nuevamente. Esta vez sucedió en Radio Splendid, donde ambos fueron -en dos temporadas distintas- estrellas de "La hora 'Geniol". La foto surgió espontáneamente, como si estuviesen cantando a dúo.

martes, 28 de junio de 2011

CARLOS DANTE: EL" TORCAN"


Año 1906: Nace en el Barrio de Boedo en un hogar humilde, quien llegaría a ser uno de los interpretes mas famosos de nuestro tango; Carlos Dante Testori.
Su padre Luis, su madre Maria Rufino, sus hermanos, Ángela, Luisa, Agustín Domingo, Marcos Valentín, y Elías José.
Integra el coro vocal del Colegio donde cursaba la primaria, destacándose por su notable afinación, y su color de voz distinta .

Año 1916: Como provenía de un hogar humilde, él y sus hermanos salen a trabajar para colaborar con sus padres dado que las épocas eran muy duras y escaseaba el trabajo.
Como todo pibe, le gustaba mucho el fútbol y tan mal no lo hacia dado que lo incorporan a la 4ª. División de Estudiantil Porteño.

Año 1922:  Como tenía vocación por cantar, y se destacaba de todos los jóvenes de la barra del Colegio,  lo eligen para ser el animador de las reuniones sociales, donde cantaba y bailaba actitud que llamó la atención de los profesores del Colegio, que le recomendaron dejar el fútbol y dedicarse a estudiar canto para perfeccionarse, dado que le pronosticaron un buen futuro.
Consideró esa sugerencia y toma clases de canto, que perfeccionan su estilo, sus condiciones naturales, sumadas a la impostación y el dominio de la respiración, lo van convirtiendo en una joven promesa en una carrera donde no había muchos exponentes.
En su barrio de Boedo, en  (Belgrano y Saavedra), había un café donde paraban vecinos que tenían vocación de ser interpretes del Tango.
Entre ellos se encontraban los hermanos Caló, Juan, (bandoneón) Salvador,(Pianista y Trompetista), Antonio,(Trompeta), Armando,(Contrabajo), Roberto (Chasonier) y Miguel, (Bandoneón) quienes estudiaban música. Miguel, quien había nacido en 1907, era un año menor que el joven Dante, y al igual que  todos sus hermanos ; sentía una atracción muy particular por el Tango.
Miguel arma su propia orquesta, pero necesitaba un estribillista (lo que con el tiempo sería cantor), y conociendo las mentas del pibe Testori, quien además era su amigo, le propone el lugar, a lo que Dante acepta.

Año 1927: Debuta como chansonier el 16 de agosto de ese año en la orquesta de Miguel Caló , en el cine Astral. En la misma época, Azucena Maizani en la misma sala, era la sensación del momento siendo acompañada por Francisco Pracánico.
Cumplido un ciclo, Dante, deja a Caló y pasa a ser estribillista de un conjunto dirigida por Anselmo Aieta donde también la integraban , Pedro Mafia, y Juan  D' Arienzo.
Para esos tiempos Carlos Dante era un chanssonier muy requerido por distintos conjuntos, su grado de profesionalidad , su hermosa voz de tenor, y su pinta de galán abonaban el terreno para que así ocurriera.

Año 1928: Graba para Darienzo su primer tema “Callejas Solo” en el sello Electra.(Tango dedicado a un jockey de la época.) Grabó en total con D' Arienzo 35 temas.

Su camino al éxito

Sin temor a equivocarnos podemos sostener que Dante fue uno de los profesionales del canto mas relevantes, dado que se lo consideraba dentro del grupo de los 10 mejores interpretes de nuestra canción ciudadana, de la época,  donde por supuesto el líder era Gardel, seguido por Corsini, Magaldi y otros que con el correr del tiempo no tuvieron la vigencia de los nombrados;  en el gusto popular.

Año 1928: Contrae enlace con Celia Alonso, y viajan de luna de miel a  Francia. El tema era que Francisco Canaro lo contrató para que se incorpore a la orquesta de sus hermanos Juan y Rafael  Canaro, que se encontraban actuando en Paris y capitales de España. Fueron cuatro años los que duró su permanencia en el viejo mundo; este galán , tenor del tango, dejó bien sentada la calidad de los interpretes de nuestro país.

Año 1932: Regresa a Buenos Aires, y Francisco Canaro lo invita a grabar acompañado de su orquesta.(Graba 4 temas).

Año 1936: Agustín Irusta, otro cantor nacional, lo convence para que forme dúo con   Pedro Noda dado que  se había desvinculado de Magaldi; así es que nace el dúo Dante-Noda y son aceptados inmediatamente y  convocados por todos los lugares donde se escuchaban Tangos.

Año 1937:  Trabaja en cine integrando como vocalista la orquesta de Elvino Vardaro, canta el Tango Ciudad acompañado por Vardaro en Violín  y Troilo en Bandoneón.
La película se llamaba Muchachos de la Ciudad. Nace Su hija a la que bautizan Nelida Rosa.

Año 1939: Vuelve a integrar la orquesta de Miguel Caló, dejando grabado , el tema Si Volviera Jesús.

Año 1941: Canta en la orquesta de Nicolás D' Alessandro, grabando "A Mi Me Llaman Juan Tango", "Uno" , etc...(5 temas). Íntimamente el sabía que estaba para mas, pero la suerte le era esquiva.
Había ya comenzado la época de Oro en el cuarenta y  el se sentía frustrado por no ser vocalista de alguna orquesta mas relevante.
Estuvo a punto de largar todo y seguir como funcionario del estado.(trabajaba en Y.P.F.).
Pero, como todo llega en esta vida, un hecho fortuito le alegraría el corazón y reavivaría sus deseos de seguir vigente en el Tango.

Año 1943: La desvinculación intempestiva de Floreal Ruiz de la Orquesta de De Angelis , para pasar a ser cantor de Troilo, (se había ido Fiorentino ), le abre a Carlos Dante, el camino para pasar a pisar fuerte en el Tango.

Su época de oro

Año 1943: Si bien Dante era una figura reconocida en el ambiente de los interpretes del Tango, todavía no había llegado su justo reconocimiento de parte del publico porteño, y eso el lo sabía.
Alfredo De Angelis, una vez que asumió el mal trago que le causó el éxodo de Ruiz, (se fue sin avisar) y conociendo la calidad interpretativa de Calos Dante, no lo pensó mucho; lo invitó a sumarse a su Orquesta, para cubrir el vacío dejado por el notable Floreal.
La famosa década de Oro, exigía mucha demanda de Orquestas  y cantores y la Orquesta de De Angelis podía satisfacer a cabalidad el reclamo dado que  era una de las cinco líderes del momento.
Dante sería el segundo cantor de esta agrupación orquestal de ritmo tan particular, (que privilegiaba la actuación de sus cantores)  y que además contaba con muchos simpatizantes.
Formaría dúo con Julio Martel un joven que para entonces contaba con 20 años, con una voz pequeña, pero distinta y apoyado por su pinta de galán que enloquecía a las jóvenes de la época.

Año 1944: Nace su segundo hijo, al que bautizan con el nombre de Luis Julio. El  dúo Dante-Martel llegó a ser uno de los mas reconocidos entre los cultores de nuestra música.(Grabaron a dúo 17 temas).
El famoso programa El Glostora Tango Club , (15 minutos por día de lunes a viernes de 20 a 20,15 h.) que se emitía diariamente por Radio El Mundo, dejó un precedente hermoso para nuestro Tango.
Primero con Julio Martel y después con Oscar Larroca, Dante nos emocionaba con temas como Mocosita, Gloria, Lunes, Milonguita, Besame en la boca, Aleli, Melenita de Oro, Vieja luna, Carnaval Ya estamos iguales.
Carlos Dante  con sus 37 jóvenes años, veía materializar por fin  sus sueños, su hermosa voz , con la madurez exacta, lo convertían en uno de los cantores mas solicitados, dado que todo lo que cantó con De Angelis fueron rotundos éxitos, sino baste recordar los termas Soñar y Nada Mas, Melenita de Oro, Cruz de Palo etc...por citar algunos...

Año 1951: Insólitamente sin mediar ningún justificativo, Julio Martel abandona la Orquesta, comentando que dejará de cantar para dedicarse a actividades comerciales mas remunerativas.
En su reemplazo para acompañar a Dante, De Angelis incorpora a Oscar Larroca.

Año 1957: Con la Orquesta de Alfredo De Angelis, Carlos Dante alcanza a grabar 139 temas, siendo su ultima grabación,  La Flor del Palmar.
Fueron 26 largos años, que duró esta sociedad para gozo de los amantes del Tango.

Su nueva etapa

Año 1958: El 30 de Marzo de este año, y después de actuar con De Angelis en los bailes de Carnaval del Club Provincial de Rosario, Dante se retira en buenos términos de la orquesta que lo consagró como uno de los mas grandes interpretes de nuestro Tango.
Al poco tiempo Larroca, le sigue los pasos, y juntos deciden formar un conjunto para seguir cantando.
Trabajan con bastante éxito en la capital e interior del país. (graban 2 temas). Coincide que para esos años el Tango, decrecía verticalmente en las preferencias populares por lo que deciden de mutuo consentimiento dar por finalizada la sociedad.
Carlos Dante tenía luz propia, situación esta que como solista era requerido de distintos países, y de todas nuestras provincias.

Año 1965: Con la orquesta dirigida por el maestro Víctor Braña, graba 16 temas , y realiza giras por los países sudamericanos como Chile, Colombia, Venezuela etc.

Año 1966: La embajada del Tango cuya dirección Orquestal estaba bajo la batuta de Jorge Dragone, visitan varios países de América, y la misma estaba integrada por los pesos pesados como interpretes ; como eran Floreal Ruiz, Jorge Valdez, Alberto Morán, Mario Bustos, Ricardo Ruiz, y Carlos Dante.(graba 4 temas).

Año 1969: Acompañado de una orquesta dirigida por el maestro Aquiles Roggero, que integraban Alberto Del Bagno, Fernando Suarez Paz, Daniel Lomuto, Orlando Trípodi  y Carlos Monteleone  (graba 12 temas).

Año 1970: Graba con la Orquesta de Oscar de la Fuente (2 temas).

Año 1972: Graba sus últimos 6 temas. Había cumplido 66 años , y  Desarrollado una intensa labor a favor de nuestro Tango. Fue una decisión inteligente, ser cantor implicaba mucha dedicación, donde tenía que seguir vocalizando, trabajando sobre la respiración, y el que lo hizo toda su vida, era conciente que el éxito de permanencia pasaba por allí.

El Fin de su carrera

Había decidido no cantar mas, pero no lo hizo en forma traumática, sino mas bien fue espaciando mas y mas sus actuaciones, donde cuando cantaba lo hacía mas para amigos que persiguiendo un fin comercial.
Asistía a los homenajes o a las invitaciones que le hacían pero con la condición que no le pidan cantar.
 Los que lo seguimos a lo largo de su carrera , respetábamos esta decisión , era su voluntad .

Una lección inolvidable

Contactó conmigo allá por el año 1975  un joven empresario de la ciudad de La Plata, que tenía intenciones de hacer un Festival de Tangos en la ciudad capital de la Provincia,  con las mas grandes figuras que todavía cantaban. Me pidió que no me olvide de Carlos Dante dado que el era un admirador de este cantor.
Yo no estaba muy convencido que Dante aceptara, pero no obstante contacté con el y formalizamos una entrevista en su casa de Mataderos, para un sábado media mañana.
Llegó el día y toqué el timbre de un chalecito ubicado en barrio Naon, se abrió la puerta y me encontré con una persona jovial y muy atenta, estaba en presencia de un grande.
Me hizo pasar, me presentó a su señora esposa, y tuvimos un dialogo mas o menos así; ;  “.... Apreciado Maestro, lo requieren de La Plata para que actúe. le ofrecen buen dinero..”
Hizo un profundo silencio, esos que expresan mas que las palabras...me miró fijamente a los ojos antes de contestarme y me dijo; “...mire pibe, tengo muchos años; colgué los botines, además hace 4 años me jubilé de YPF, y soy conciente de mis limitaciones vocales, los años no pasan en vano.
Prefiero que la gente me pare por la calle y me pregunte; “...porque no canta mas ; Don Carlos;  y no que comenten de atrás, Porque seguirá cantando este hombre ?.
Le comento esto porque me considero afortunado, tengo a mi lado la compañera de toda mi vida, tengo el amor de mis hijos, la gente me quiere, ¿Qué mas puede pedir una persona a Dios?.
Yo me puedo dar ese lujo, porque como le comenté no tengo apremios económicos;  sería patético que me vean cantar, a mi edad , prefiero que me recuerden a través de mis discos.
Hice silencio, me embargó un sentido de culpa, donde tuve la sensación que había metido la pata, dado que yo ya sabía que esa sería la respuesta. Pero el verlo y charlar mas de una hora con el, justificaba cualquier argumento. Me llamó la atención su grandeza, su humildad, su forma de ser sincera.
Le agradecí el haberme atendido, me estrechó su mano y me fui de su casa pensando cuanta razón tenía, dado que muchos cantores que tienen una trayectoria, por no tener un soporte económico, tienen que seguir cantando, donde en muchos casos el paso de los años dejan huellas que no se pueden maquillar.