miércoles, 29 de febrero de 2012

LUCIO PASSARELLI Pianista, arreglador, compositor por JOSE VALLE


Nació en Bahía Blanca, el 7 de diciembre de 1943 y estudió Armonía y Contrapunto con Simón Lachner.
Es autor de numerosas composiciones como: “Color noche”, ”Siempre agosto”, “Responso a mi Viejo”, “El Pepe”, “Entrañable”, “Tema para cuatro”, “Mi amigo Juan”, “Cuando despierta Buenos Aires”, “Cuando guste…”, “Preludio a mis nietos”, “El aguante”, etc.

Algunas de estas obras, junto a varios temas arreglados por Passarelli, fueron ejecutados por la Orquesta Sinfónica Provincial de Bahía Blanca y el Ensamble “Ad Hoc” de dicho organismo.
Participó como arreglador y pianista invitado en el CD “Compartiendo tangos”, grabado por esta última agrupación orquestal.
Dirigió durante cinco años el Sexteto de Tango de la Orquesta Sinfónica de Bahía Blanca y en noviembre de 2009, dirigió un ensamble de cuerdas del Conservatorio Provincial de Bahía Blanca.
El Maestro José M. Ulla dirigió varios de sus arreglos en Rumania e Italia y el Maestro Leonardo Rubin hizo lo propio en Arkansas (EEUU), en el Hot Spring Musical Festival.
Dirigió y arregló musicalmente los espectáculos “Homero y después”, “Viviendo nuestra música”, “Concertango”, “Contando tangos”, “De tango somos”, “Tango…algo nuestro”, “Tango para todos”, “Tangata”, “Con…cierto tango”, etc.
Fue distinguido como mejor arreglador de tango de la ciudad de Bahía Blanca en los años 1995, 1996 y 1997 y obtuvo el premio al mejor espectáculo de tango en el año 1993 por “Viviendo nuestra música” y en 1994 por “Concertango”; ambos galardones otorgados por el Comité Ejecutivo para el tango de la ciudad.
En 1997, el Rotary Club de Bahía Blanca, le otorga una distinción en reconocimiento a su trayectoria como músico.
En el año 2008 graba su primer CD, titulado “Entrañable” y al mismo le suceden “Cuando guste…” (2010) y “Después del silencio” (2012).
Forma parte del ciclo “Bahia Blanca No Olvida” organizado por Dandy Producciones, participo del 1er festival Nacional de Tango “CARLOS DI SARLI” de Bahia Blanca
Su tango “Entrañable” fue arreglado por el Maestro Osvaldo Piro quien lo incluirá en su próximo disco al igual que “A la distancia” último tango compuesto por Osvaldo Piro y Lucio Passarelli.
Tiene  la maravillosa virtud de hacer disfrutar la música en todas las formas posibles un estilo netamente  poético, de un lirismo tan refinado como sutil.
 Pocos son los músicos que, a través de la exploración de los recursos
tímbricos y dinámicos del piano, han hecho cantar al instrumento con la maestría con que él lo hace.


VARELATANGO EN LA CASONA EN MARZO Y ABRIL

Maria Silvia Varela comienza su trayectoria como actriz transitando diversos escenarios.

Desde el teatro independiente pasa a integrar el elenco estable de la Comedia Cordobesa.
Ya en Buenos Aires el teatro San Martín, Cervantes, de la Rivera, Regio, etc, han contado con su participación en diversas obras y personajes. En Tv, unitarios y telenovelas cuentan esporádicamente con su presencia como así también el cine.
A partir de interpretar "Milonguita" de la premiada obra de Julio Tahier, descubre su afinidad con el tango.
Los shows de su autoría "Interpretangos" y "Tango en negra" permiten que su voz y expresividad converjan logrando que sus interpretaciones tengan un inconfundible sello.
Quienes se acercan a sus shows tienen asegurado el disfrute de espectáculos integrados escénicamente con el acompañamiento de músicos y bailarines. Las letras de los autores más representativos del género (Homero Expósito, Enrique Santos Discepolo, Homero Manzi, Eladia Blazquez, entre otros) se potencian en su particular estilo.

Formación actoral
·         Estudió en el Seminario de Arte Dramático de Córdoba: "Yolie Libois" del Teatro Rivera Indarte, e hizo varias obras de teatro independiente.
·         Seminarios Arte Dramático en el Teatro San Martín de Córdoba.
·         Por concurso de oposición y antecedentes integró elenco estable de La Comedia Cordobesa.
·         En Bs. As: Comedia Musical / Danza Jazz / Zapateo Americano / Tap con Antoinette San Martín, Adelco Lanza, Héctor Estévez, entre otros.
·         Tango / pasodoble / milonga con coreógrafa Estela Arcos.
·         Tango (técnica y perfeccionamiento) con Juan Carlos Copes y Domingo Pugliese.
·         Egresada año 2006 de la Academia Nacional del Tango "Liceo del tango", diplomada en Historia del tango.

Trayectoria profesional
Trabajó en 30 obras de teatro aproximadamente formando parte del elenco de la Comedia Cordobesa, entre los que se destacan:
Comedia Cordobesa
·         “Antígona Vélez” de Leopoldo Marechal. 1977.
·         "La Danza de los Camisones" recopilacion de Flaminio Scala,di la comedia dil arte- zanni-Franchesquina- 1978
·         “El Organito” de Armando Discépolo.
·         “Los Físicos” de Fiedrich Dürrenmat
·         “Un tal Servando Gómez” de Samiel Eichelbaum
·         “Nuestro Fin de Semana” de Roberto Cossa.
·         “Harold y Maude” de Colling Higgins
·         “Vive como quieras” de Kauffman y Haert.
·         “Stéfano” de Armando Discépolo. 1981-82
Teatro en Buenos Aires
·         “Cremona” de Armando Discépolo. En el Nacional Cervantes, dirigida por Alfredo Zemma, con Dario Vitori, Nelida Romero, Natan Pinzon, Nini Gambier, Roberto Carnagui y grandes de la escena. Personaje: Cristina: (La gallega).
·         "Eran 5 hermanos y ella no era muy santa" de Miguel Iriarte- en teatro San Martin: Centro Cultural- sala Enrique Muiño- 2000-direc. Ruben Pires -pers. Ivone-
·         Las Naifas y los Garabos", sainete de "Sombra Rius", personaje principal, elegida por la autora, y dirigida por la misma autora, en la sala "Fray Mocho" 2007/8.
·         "Juicio al Tango" de Leopoldo Marechal, Teatro de la Fabula" dirc. Rub. Santagada-   5 personajes varios- baile y canto-2008/9
Los más destacados en Buenos Aires / Santiago de Chile y Montevideo:
·         “La Lección de Anatomía” de Carlos Mathus, temporada 1982/83/84 -personajes varios-
·         “Una revista de Locos” (comedia musical). Revista, como corista -con Don Pelele, Afredo Barbieri, Jose Marrone, etc. Temporada 1984- en Montevideo (Teatro Estella d'Italia) y Bs.As.
·         “Fuenteovejuna” de Lope de Vega en el Teatro San Martín con dirección de Roberto Villanueva. Con Hugo Soto, Juan Manuel Tenuta, Afonzo de Gracia, y otros- pers. Jacinta- 1985.
·         “Sexo, necesidad Maldita” Teatro – Concert Direc. Osvaldo Guidi - varios personajes- 1986.
·         “Las Muchachas del Tiempo Aquel” En el Teatro de la Rivera, con dirección de Juan Carlos Thorry, con Tania, Margarita Padin, Elena Lucena, Nelly Paniza, Mourice Jouvet, Peggy Sol, Gabriel Robito, Jorge Barreiro, Irma Cordoba, Gustavo Cerrini, y otros. Como bailarina, cantante y cuples, squechs. 1988
·         “La Bicicleta” de Walter Operto En Centros Cultural San Martín y Recoleta. Dirección Omar Viale. Protagónico- dos personajes- tambien en Cárceles de Caseros, Devoto y Ezeiza- 1987
Teatro para la televisión:
·         “Cremona” de Armando Discépolo. En el Nacional Cervantes, dirigida por Alfredo Zemma, con Dario Vitori, Nelida Romero, Natan Pinzon, Nini Gambier, Roberto Carnagui y grandes de la escena. Personaje: Cristina: (La gallega).
Trabajos realizados para la Televisión:
·         “Amar al Salvaje” Telenovela de Luis Gallo Paz- Canal 9
·         “Cuando es culpable el amor” Telenovela Manuel Muñoz Rico Canal 9
·         “Las 24 horas” Unitarios de Marcia Cerretani. Canal 13
·         “Tema Libre” Ciclo de autores jóvenes. ATC
·         “El Lobo” telenovela de Alma Bressan – Canal 9
·         “Tiempo Cumplido” Semanal episódico – ATC
·         “La Cuñada” de Alberto Migré – Canal 9
·         “Ficciones” ciclo de Sergio Renán. Libro “Al Vencedor” de Marta Lynch Dirección de Roberto Castro – ATC
·         “La Bonita Página” Unitarios de Ismael Hasse – ATC
·         “Rebelde” telenovela de Delia Fiallio
·         “Un retazo de vida” miniserie basada en novelas de Corin Tellado con dirección de Marta Reguera – Canal 2 –
·         “Stress” telecomedia semanal de Juan Carlos Mesa – Canal 13
·         “Manuela” Telenovela en coproducción con Italia. Canal 13.
·         “Princesa” idea y producción de Raúl Lecuona. Canal 9
·         “Los Libonati” Canal 9
·         “Zona de Riesgo” – Dirección de Alberto Ure - Canal 13
·         “Tal para cual” Dirección Gerardo Mariani – Canal 13
·         “Los Benvenuto” Telecomedia mediodias de domingo en vivo Canal 11
·         “Nueve Lunas” Ciclo semanal con continuidad. Dirección Alberto Lecchi - Canal 13 –
·         “El día que me quieras” Telenovela canal 13.
·         “Mujercitas” telenovela – Canal 9 –
Participaciones cinematográficas:
·         “Flores robadas en los jardines de Quilmes” libro Jorge Asis- Dirección A.Ottone
·         "El Manosanta" con Alberto Olmedo -
·         “Pa’ver gente” ó “La bailanta” Dirección Luis Rodrigo
·         “El acompañamiento” libro y dirección de Carlos Orgambide. Premio Festival de Cannes. Con Carlos Carela, Ahide Padilla, Maria Rosa Gallo, etc.
TANGO
·         1990/91/92 "Gotán, ópera rantifusa" de Julio Tahier, premio Moliére '78, dirigida por su autor. Interpretó a Milonguita, con Gustavo Cerrini como Julián, Noemí Kazán y David Sneck completaban el elenco.
·         “Interpretangos” idea y formato María Silvia Varela. Puesta en escena Chuli Rossi. Estrenó dentro del ciclo “La Joven Guardia del Tango” en la Biblioteca Nacional. Palace de Glaise. Centro Cultural Recoleta. Patio de Cultura del Palacio de Gobierno de la Ciudad. "Dixi Cafe Concert"-Santa Fe y Cerrito- ciclos de shows-. Manzana de las Luces. Hall del Teatro San Martín.
·         Tres temporadas continuas en Café Tortoni – Sala Alfonsina – 1997/98/99.
·         Participación como invitada al Festival Baradero’98.
·         Participación en los festivales solidarios “Honrar la Vida” III y IV convocados por el Padre Farinello
·         “Eran 5 hermanos y ella no era muy Santa” de Miguel Iriarte. En el Centro Cultural San Martín. Dirección Rubén Pires.
·         "La Mia Citta" Concert en Lanús Oeste-peatonal- 2000-
·         Grabacion del CD "Tango en Negra"-"A mis Padres"- en estudio "Silvester"- 2001
·         “Gotán” de Julio Tahier En La Capìlla, Centro Cult. San Martín, Teatro Regio y giras.
·         Actuaciones en diversos ciclos en el "Café Montserrat" - 2003 al 2009. "Cafe Bucousky" -2000-. "Cafe Bartolomeo", 2005 y 2006- .
·         Presentaciones en provicias del interior, como Catamarca, ciudad paterna- 2005- etc.
·         "Diplomada en Tango" por la "Academia Nacional del Tango" - 2004/5/6 -
·         Actuación en el "Café Homero"
·         Actuación en "Mitos Argentinos"
·         Actuación libre para el turismo en San Telmo
·         En "Nefertiti", San Telmo
·         Cena Show en restaurante "Ernesto H"
·         Cena Show en en Galería del Viejo Hotel. - 2008
·         Cena Show: "Taconeando" 2009- show de tango para turistas internacionales y argentinos.
·         "La vereda de Beba"-con trio del Maestro Jorge Dragone y tres parejas de baile-
·         "La Casona del Teatro" 2008-2009- Concert- todos shows de mi autoria. y presentacion de mis CDs.- Cena Show-.
·         Cena Show : "Resto del Viejo Hotel"-2010-2011- Galería del Viejo Hotel - San Telmo-  y Eventos numerables varios, privados y publicos-.
·         "La Biblioteca Cafe"- Show: "Interpretangos" en piano: Maestro Jorge Dragone y pareja de baile -julio 2011-
Participaciones en los programas de TV
·         “La Noche con Amigos” conducido por Leonel Godoy – Canal 7
·         “Los amigos del Tango” conducido por Juan Carlos Mareco – Canal 7
·         “Argentinísima” Conducción Julio Marbiz – Canal 2
·         “Jóvenes Valores” conducido por Santos Biassatti Todo Noticias
En radio:
·         Micros a su cargo invitando y promoviendo nuevos grupos y cantantes del género (“Hoy Tango Joven”) en el programa “Por siempre Tango” conducido por Rubén Reale en Radio del Pueblo.
·         Micros con biografías de autores, músicos y cantantes dentro del programa “Qué País” con la conducción del Pollo Mactas en Radio América.

viernes, 24 de febrero de 2012

“la Discépolo con falda”

(Avellaneda, 1931 / Buenos Aires, 2005) 
A Eladia Blázquez la llamaban “la Discépolo con falda” en homenaje a su gran talento para escribir verdades directas y sinceras, como también lo hacía el genial Enrique Santos Discépolo.
Incursionó, como cantante y compositora, en diversos géneros como la canción española y sudamericana, el folklore y el tango. Es autora de canciones fundamentales del repertorio tanguero como “Somos como somos”,“Sueño de barrilete” y “Honrar la vida”.
La poesía de Blázquez tiene entonaciones lunfardescas que se deslizan entre palabras cristalinas y cálidas como una mañana de verano porteño. Poeta popular en toda la extensión del término, dejó una profunda huella en el arte de Buenos Aires. Honró una ciudad con su canto, les hizo justicia a los vecinos, a sus estados de ánimo, a sus alegrías y tristezas, a su identidad.
Fue declarada Ciudadana Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires, en el año 1992.
En el prólogo del libro Mi ciudad y mi gente, que reunía varias de sus mejores obras, el inolvidable poeta Cátulo Castillo así se refirió a Eladia:
“Crecida debajo de sus mechas rebeldes empieza a prontuariarse en este gran murmullo ciudadano como una revelada manera de “cantar las cuarenta” a la poética porteña, en un “tute” cabrero, para tirarse a más y en un juego de hombres. Pero calza polleras y está esperando el ángelus en un portón de tiempos, enigmática y triste desde que halló la hondura casi abismal del tango, que tentaba en su calle avellanédica vaya a saber qué vate melancólico, y en esos contramanos con que la vida te puede hacer “capote” para siempre”.
Murió en 2005, después de padecer una larga y penosa enfermedad.
DOMINGOS DE BUENOS AIRES 
Hoy no estoy para nadie,
hoy quiero…
colgar el saco y la rutina,
clausurar la oficina,
la memoria,
el tufo a nicotina,
la práctica tenaz en que me extingo;
¡cambiar la triste historia
por la pequeña gloria
del domingo!
Calzarme zapatillas en el ánimo,
Abrirme en desperezo muy tardío,
descubrir que en mi casa hay un geranio,
ganar un tiempo corto
pero mío.
Por hoy no darle cuerda a los relojes,
desenchufar el loco mecanismo,
y  antes que un nuevo lunes me despoje
hoy quiero estar conmigo,
hoy es domingo.

EL CORAZÓN AL SUR
Nací en un barrio donde el lujo fue un albur,
por eso tengo el corazón mirando al sur.
Mi viejo fue una abeja en la colmena,
las manos limpias, el alma buena.
Y en esa infancia, la templanza me forjó,
después la vida mil caminos me tendió
y supe del magnate y  del tahúr,
por eso tengo el corazón mirando al sur.
Mi barrio fue una planta de jazmín,
la sombra de mi vieja en el jardín,
la dulce fiesta de las cosas más sencillas
y la paz en la granilla de cara al sol…
Mi barrio fue mi gente que no está
las cosas que ya nunca volverán
si desde el día que me fui, con la emoción y con la cruz
¡yo sé que tengo el corazón mirando al sur!
La geografía de mi barrio llevo en mí,
será por eso que del todo no me fui:
la esquina, el almacén, el piberío
los reconozco… son algo mío…
Ahora sé que la distancia no es real
y me descubro en ese punto cardinal
volviendo a la niñez desde la luz,
teniendo siempre el corazón mirando al Sur…

miércoles, 22 de febrero de 2012

ALBERTO ECHAGUE POR RICARDO GARCIA BLAYA

Mi relación con Alberto Echagüe es muy especial porque fui entrañable amigo de su hijo Osvaldo, lamentablemente fallecido muy joven.
No puedo ser imparcial, porque tuve la suerte de escucharlo con el mejor de los testigos, quien me relataba historias que eran verdaderas imágenes de un chico hacia su padre artista.
Se mezclaban los resentimientos de las largas ausencias, la incomprensión de un ambiente tanguero que se iba degradando con el paso del tiempo y que nada tenía que ver con su circunstancia y su educación. Hasta tal punto que Osvaldo hizo su vida alejado del padre y con una visión crítica, hasta vergonzosa de él.
Pero ocurrió algo muy curioso a partir de la muerte del cantor. La actitud distante se convirtió en una profunda reivindicación que lo llevó a comprender y revalorizar con orgullo el valor humano y artístico de su padre.
Juntos, aprendí a conocer sobre la popularidad que tuvo este artista en los años cuarenta, pero lo más importante fue valorar las "perlas" de su repertorio, haciendo míos los dos tangos preferidos de Osvaldo: "Indiferencia" y "Este carnaval".
Es verdad, Echagüe no fue técnicamente un gran cantor y más si lo comparamos con la excelencia vocal que abundaba en la década del cuarenta. Pero reconozcamos que cuando se lo permitía el vértigo deD'Arienzo, afloraba una voz sensible, por momentos dramática, que sabía contar eficazmente el relato de la letra.
Fue el cantor más importante de la orquesta, el más taquillero, pero además, un caballero, un hombre de bien al que nunca la fama lo mareó y que, pese a los avatares de su carrera artística, supo formar una familia y ganarse el cariño de todos los que lo conocieron.
No puedo evitar encontrarle algo familiar con Ángel Vargas. No se si el estilo canyengue, o el fraseo reo, o el registro, pero algo tienen, más allá del hecho de que ambos cantaran para Ángel D'Agostino. Pero lo cierto es, que la carrera de uno y otro estuvo signada por la calidad y repertorio de dos orquestas muy diferentes, donde evidentemente, Echagüe no resultó beneficiado.
Comienza cantando desde muy chico en la ciudad de Rosario (la ciudad más importante de la provincia de Santa Fe, distante 300 km de Buenos Aires).
En los primeros años de la década del treinta se muda a Buenos Aires y debuta en Radio Stentor con su nombre artístico Alberto Echagüe.
En el año 1932 es cantor de la orquesta de Ángel D'Agostino, actuando en el cabaret Casanova y en el teatro París. Es el propio D'Agostino quien le presenta a Juan D'Arienzo, que lo invita a Radio El Mundo a escuchar su orquesta. Allí se produce la chispa que enciende uno de los binomios más populares del cuarenta: D'Arienzo-Echagüe.
Cuenta Gutiérrez Miglio, en su libro “El tango y sus intérpretes” volumen 1, que en esa ocasión cuando «llega el momento y la orquesta irrumpe con el tango "Madre", Alberto Echagüe le hace una seña a D'Arienzo ofreciéndose para cantar el estribillo. El maestro, con la cabeza, contesta afirmativamente y Echagüe canta. Al rato llega el director artístico de la radio y pregunta quién cantó. D'Arienzo le contesta y el director le dice: “Ese es el cantor de tu orquesta”.»
Actúan en el cabaret Chantecler, en Radio El Mundo y en un sinnúmero de bailes y clubes. El suceso es impresionante, dejando en el disco 27 temas, comenzando por "Indiferencia", el 4 de enero de 1938, hermoso tango de Juan Carlos Thorry y Rodolfo Biagi, finalizando esta etapa el 22 de diciembre de 1939 con "Trago amargo" (de Rafael Iriarte y Julio Navarrine).
Tentado por el pianista Juan Polito, Echagüe se aleja de la orquesta y continua su labor con este, actuando en la clásica confitería Richmond, además de bailes y actuaciones en clubs y teatros de barrio.
La relación del cantor con “El Rey del compás” tuvo varias etapas, que se prolongan hasta el año 1975. La segunda de ellas comienza en 1944 y va hasta 1957, es la más prolongada, y también la más exitosa. La orquesta es una tromba y el cantor no le va en zaga. La calidad de los temas es muy dispar y el repertorio apuntaba al éxito comercial y no al logro artístico.
No obstante lo expresado algunos temas son antológicos: "Este carnaval" (de Luis y Miguel Caruso), "Paciencia" (de D'Arienzo yFrancisco Gorrindo) y la singular versión de "Esta noche me emborracho" (de Enrique Santos Discepolo) son pruebas de esta aseveración.
El otro cantor de la orquesta era Armando Laborde que, por su estilo y características vocales era un ideal complemento al trabajo de Echagüe. Tanto es así que en el año 1957 ambos se separan de la orquesta y forman la propia con la dirección del bandoneonista Alberto Di Paulo. Graban para el sello Odeón "Soy varón" y "Nosotros", y para el sello Philips "La refinada" (milonga) y "Carloncho".
Tres años más tarde, en 1960, ingresa a la orquesta de Juan Sánchez Gorio y actúa en Radio El Mundo, grabando dos temas.
Ya nuestro cantor era un solista consagrado, dedicado a amenizar bailes y a actuar en radio y televisión.
En 1968 comienza la tercera y última etapa con el maestro D'Arienzo, viaja a Japón y obtiene un extraordinario éxito. Lo curioso de la anécdota es que la orquesta viaja sola, sin su director que era fóbico a los aviones.
Los tiempos habían cambiado, el deterioro artístico era evidente, pero los fanáticos seguían fieles al ritmo y a la voz del famoso rubro. De esta época rescato el tango "Mala suerte" (de Francisco Lomuto yFrancisco Gorrindo) grabado el 11 de diciembre de 1974, y "Vamos Topo todavía", dedicado al jockey uruguayo Vilmar Sanguinetti, del 31 de enero de 1975, es decir un año antes del fallecimiento de D'Arienzo y la última del binomio.
Alberto Echagüe fue un viajero incansable, recorrió toda América y Estados Unidos, donde estuvo en cinco oportunidades.
Es autor de los tangos "Gladiolo", "Tus cartas cómo tardan" y "La tango", todos ellos con música de Carlos Lázzari; "Alias Orquídea", con el productor televisivo Alfredo Gago y "Porque tú me lo pides", conEnrique Alessio.
Esta semblanza hecha con la ternura y emoción de los recuerdos más lindos, intenta ser el homenaje póstumo al padre de mi querido amigo Osvaldo Rodríguez, a quien nunca le voy a perdonar que se haya ido.

sábado, 18 de febrero de 2012

TANIA LA HISTORIA DE UN SIGLO DE TANGO

Tania, la mujer que murió  entre las mismas paredes que en 1951 despidieron a Discepolín, vivió más de un siglo. Y aunque la singularidad de su biografía desalienta la búsqueda de analogías, ella había hallado una comparación adecuadamente osada para referirse a sí misma: Fui la Madonna de los años 30.Es cierto que biógrafos, testigos y la nitidez de su propia memoria hicieron de Ana Luciano Divis -Tania-, además de una celebridad del tango, una leyenda de audacia y personalidad.Nacida en Toledo, España, en fecha que ocultaba con empeño (se presume que entre 1893 y 1895), debutó allí como cupletista siendo una adolescente. 
Actuó durante varios años con distintos nombres artísticos, hasta adoptar el de Tania Mexican cuando comenzó su relación con el bailarín Antonio Fernández Rodríguez, de los Mexican. Antonio fue su primer marido, y con quien llegó por primera vez a Buenos Aires, en 1923, en una gira.En 1926 se instaló aquí, con un matrimonio que comenzaba a desintegrarse y dejando una hija al cuidado de su familia, en España. Ya tenía algunos tangos mezclados entre los cuplés y las tonadillas de su repertorio, y la íntima decisión de afincarse. Debutó con la orquesta de Roberto Firpo en el local Casino.Pronto actuó con la orquesta de Osvaldo Fresedo. Y comenzó su ascenso en el suntuoso cabaret Follies, según recordaba, con Fumando espero, A la luz de un candil, Sentencia. Recursos vocales suficientes y sobrado glamour abonaron lo que fue un estilo fundador, en una época en la que una escuadra de brillantes cancionistas porteñas hacían escuela.Sergio Pujol, en su libro Discépolo. Una biografía argentina, analiza este paso del cuplé al tango: No le había llevado mucho tiempo descubrir que cantar tangos no era traicionar los temas españoles con los que se inició en la vida a una edad en la que muchas chicas tejían, aburridas, a la espera del príncipe azul. Según Pujol, el tango era para Tania la prolongación americana de sus primeros años y su primer repertorio, si bien para ella la tristeza de muchas de sus letras era incomprensible. Como toda cupletista, Tania había convertido el sentido trágico de la vida de los españoles en la sensualidad y picardía de una tonadilla, especie que, las veces que se ponía seria, se tocaba con el melodrama.Muchas décadas después, ella contaba que el entusiasmo con que la aplaudían las coperas del Follies -que admiraban sus brazos alhajados, su sofisticación y su amable distancia, antes que sus condiciones vocales- fueron claves para su consagración. Pero ya entonces José Razzano -el ex compañero de dúo de Carlos Gardel- andaba comentando por ahí que la gallega del Follies lograba una valiosa versión del éxito del momento, Esta noche me emborracho, de Enrique Discépolo. Fue Razzano quien convenció a Discépolo de ir a escucharla al cabaret. Allí se conocieron.Tania contó alguna vez: Francamente, al principio lo veía poca cosa para mí... para lo engrupida que estaba. Yo picaba alto: adoraba las joyas y las pieles, y me aseguraba de que el candidato tuviera un buen auto. Eso de encontrar a un muchacho bueno no figuraba en mi vocabulario.El amor entre Discépolo y Tania ató dos mundos opuestos. Los amigos de él eran Edmundo Guibourg, Berta Singerman, Victoria Ocampo, Alfonsina Storni -contaba la cantante-. Yo caía en esas tertulias de intelectuales como una bomba atómica: tan descarada, tan jovencita y encima manejando mi propio Buick cuando ninguna mujer conducía. Y ellos a mí me aburrían.La pareja atravesó períodos críticos, desapegos y turbulencias, que muchos creyeron ver reflejados en letras de Discépolo como las de los tangos Sin palabras o Uno. Vivieron juntos 24 años, hasta la muerte del poeta.Justo el 31, Yira... yira, Infamia, Cambalache, Uno, todos los tangos de Discépolo integraron el repertorio de Tania como intérprete y, aunque cantó muchos otros, se convirtieron inevitablemente en sus clásicos. Su carrera como actriz en cine y teatro, que también estuvo a menudo ligada a Discépolo, registró los rodajes de Caprichosa y millonaria, Cuatro corazones, Melodías porteñas, El pobre Pérez, y las puestas de Wunder Bar y Blum, entre otros espectáculos.Desde 1951, cuando murió el poeta, se convirtió en su memoria viva. Y con los años, en una institución.Nunca abandonó totalmente la actividad en el tango. En 1993 fue condecorada por el rey Juan Carlos de España. En 1995 actuó en Europa (con Horacio Ferrer). Hasta poco tiempo atrás consideraba proyectos. De su bienestar daban prueba un buen talante inalterable y una dieta increíble: Yo como con whisky. Envejeció jovialmente

miércoles, 15 de febrero de 2012

EL TANGO CONQUISTO JAPON

Tsunayoshi Megata 

Cuando llegamos a Japón nos podemos llegar a sorprender por una gran cantidad de cosas que tienen que ver con su historia y cultura, pero lo cierto es que los habitantes de este país adoptan también las costumbres del exterior que les puedan llamar la atención por alguna u otra razón.
Una de las cosas de las cuales los japoneses se han enamorado es el tango, género musical de origen argentino que posee una danza reconocida en el mundo entero. Con el correr del tiempo, artistas de renombre internacional se han presentado en tierras niponas, pero no tardo mucho en que personajes de la escena del Japón aparecieran en la escena para llevar a cabo por ellos mismos los diferentes conciertos de tango que siempre tienen a mucha gente presente en las butacas de los teatros.
No se sabe bien cómo llegó el tango a Japón. Las leyendas se superponen con los datos históricos, pero lo que está fuera de discusión es su popularidad. Los locales, academias, peñas y centros de divulgación del tango en Tokio y las principales ciudades de Japón, dan cuenta de ello. Si un argentino desea ganarse la vida decentemente en Japón lo único que tiene que hacer es bailar bien el tango, pulsar algún instrumento o saber cantar. Ni siquiera se reclama gran calidad; la marca criolla en el tango es tan grande que en Japón se espera que cualquier argentino sepa de tango y lo interprete mejor que nadie.
Exageraciones al margen, lo seguro es que desde 1954, cuando Juan Canaro se hizo presente en Tokio, las orquestas argentinas no han dejado de peregrinar hacia Oriente, siendo recibidas por un público expectante y feliz de poder disfrutar del tango. En la actualidad la carta de presentación más genuina de la cultura argentina es el tango. No sólo en Japón, pero sobre todo en Japón.
Ranko Fujisawa
Cuando Canaro llegó a Tokio actuaban en los escenarios nocturnos de la ciudad alrededor de veinte orquestas. La más conocida de todas era la Orquesta Típica Tokio, fundada en 1947 y dirigida por el maestro Shimpei Hayakawa. Esta formación musical recorrió el mundo divulgando el tango, estuvo en Buenos Aires más de una vez y hasta 1971 actuó en los grandes escenarios de Japón.
¿Cómo es que el tango llegó a Japón, un país tan remoto, con un idioma tan diferente del español y con una sociedad cuyas costumbres poco y nada tenían que ver con la Argentina? Hay muchas teorías al respecto. Se asegura que el primer tango que escucharon los japoneses, lo interpretó la Fragata Sarmiento, el 25 de julio de 1906, en el Orient Hotel de la ciudad de Yokohama. Están los que dicen que en la Segunda Guerra Mundial, el jazz fue prohibido por el gobierno nipón debido al enfrentamiento con EE.UU. y ello le abrió espacio al tango.
Rosita Quiroga y Olinda Bozán parece que fueron las pioneras. Otros aseguran que para la década del treinta los japoneses ya estaban familiarizados con Gardel y algunas de sus películas ya se habían proyectado en las salas de cine de Tokio y Okinawa. También se conocían para entonces películas como “La vida es un tango” y “A puerta cerrada”. Temas como “Adiós pampa mía”, “ A la gran muñeca”, “ Organito de la tarde” y “Una lágrima tuya”, ya eran conocidos por los tangueros japoneses.
Por su parte, los sociólogos aseguran que toda ciudad con puerto es tanguera sin saberlo. Que haya en la ciudad bruma, ritmo nocturno y una forma de vivir la soledad masculina, prefigura el paisaje existencial del tango. El japonés es un hombre formal, atado a códigos y ceremonias, clásico y algo anacrónico. Pues bien, estos componentes se conjugan perfectamente con el tango. Cantores como Goyeneche, músicos como Pugliese, han dicho que la noche de Tokio no se diferencia demasiado de la noche porteña.
La hipótesis más consistente sostiene que fue el barón Tsunayoshi Megata el que llevó el tango a Japón. Megata pertenecía a la aristocracia japonesa. Era hijo de un diplomático y nieto del samurai Kaishu Katsu. Pero por sobre todas las cosas, era un hombre de mundo, una suerte de niño bien que en 1920 se instaló en París para disfrutar de la buena vida. La noche en que Megata entró por primera vez al cabaret “El Garrón”, se inició la relación de tango con Japón.
En ese local nocturno, Megata no sólo descubrió el tango, sino que aprendió a bailarlo. Cuando en 1926 regresó a Japón, en su equipaje de hombre de mundo traía una colección de discos de tangos, entre los que se destacaban los interpretados por las orquestas de Manuel Pizarro, Genaro Espósito y Eduardo Bianco. Los sellos discográficos estaban escritos en francés, motivo por el cual durante años los japoneses creyeron que el tango había nacido en Francia.
O sea que el tango argentino llega a Japón desde París, una interpretación que a nadie debe escandalizar ya que la mayoría de los historiadores aseguran que el tango fue aceptado en la Argentina cuando en París se transformó en la música preferida de los calaveras y gigolós que frecuentaban las noches de Montmartre y el Barrio Latino.
Megata arriba con sus tangos a Tokio y lo primero que hace es instalar una academia de baile y escribir un libro que se llamará “Método para bailar el tango”. Elegante, distinguido, simpático, generoso, Megata enseña a bailar el tango y, como dice la letra que lo homenajea: “Y así llevó el tango a tierra nipona, donde gratarola lo enseñó a bailar, cuentan que Megata no cobraba un mango, por amor al tango y por ser bacán”.
Muchos años después, ese excelente cultor de la poesía del tango que es Luis Alposta, escribe la letra que Megata se merecía. Se llama precisamente “A lo Megata”. La música la compone Edmundo Rivero, quien lo graba con la orquesta de Leopoldo Federico en 1983, una grabación muy difícil de conseguir y donde son pocos los que saben que el fueye que anima ese tema está templado por Yoshinori Yoneyama, cuyo apellido hace innecesario explicar el origen de su nacionalidad.
El barón Megata murió en 1976 y el 29 de mayo de 1982 el tango de Alposta es ejecutado por primera vez en Tokio. Allí se habla de la personalidad de este singular personaje de la noche: “No sólo enseñaba cortes y quebradas, también daba clases y hombría de bien, junaba de noches y de madrugadas, piloteaba aviones y más de un beguén”. Y la última estrofa que constituye toda una teoría acerca de cómo la leyenda se hace historia.: “Y tal vez ahora que está aquí presente, mientras una Sony nos pasa “Chiqué”, alguien allá en Tokio, elegantemente, baila a lo Megata sin saber quién fue”. La gloria de lo anónimo, como le gustaba decir a don Antonio Machado.
El viaje del tango de Buenos Aires a Tokio fue un itinerario de ida y vuelta. Así como a principio de la década del cincuenta empezaron a llegar a Japón los primeros porteños, para esa misma época desembarcaron en nuestras playas los primeros cantantes de tango japoneses. Me refiero, en primer lugar, a la gran Ranko Fujisawa , que aprendió a cantar el tango fonéticamente y a pesar de ese límite deslumbró en su momento al exigente público porteño.
Su primera presentación la hizo en el teatro “Discépolo” a mediados de 1953. Esa noche de gala, el presidente Juan Domingo Perón se hizo presente en la sala. Acompañaban a la japonesita Aníbal Troilo y Roberto Grela. Troilo la presentó con entrañables palabras: “Con algo de Malena y Estercita, proyecta en Buenos Aires su emoción oriental, para hacernos saber que allá, muy lejos, bajo la luna de un Oriente vestido de pagodas, se respira la dulce cosa nuestra. Esa misma que encontró por Chiclana y por Boedo, la misma de los lengues y del taco, repartiendo las rosas de los ocho sobre los patios pobres del parral y los ladrillos”. Concluye luego: “Bienvenida muchacha a Buenos Aires, mi patria, el tango y yo te declaramos nuestra y te hacemos un lugar en el rincón más puro de la orilla”.
Fujisawwa estuvo muchas veces en Buenos Aires. Grabó con las mejores orquestas e interpretó los mejores tangos . “Caminito”, “Malena”, “Sur”, “Yira yira”, entre otros. Discreta, sencilla, siempre recordaba los años duros de la Segunda Guerra Mundial y el hambre de la posguerra, cuando cantaba por un plato de comida. Fue en ese tiempo -que no era de “cercos y glicinas” precisamente- que descubrió al tango para no dejarlo más.
El otro gran exponente de Japón en el Río de la Plata fue Ikuo Abo, que llegó por primera vez a Buenos Aires en 1965 para actuar en los “Sábados Circulares” de Pipo Mancera. A sus dotes de cantor les sumó las de actor. La película “Viaje de una noche de verano” lo cuenta como intérprete. Yoyi Kanematz fue otro de los grandes embajadores del tango. Singular personaje que en 1975 llegó a Buenos Aires y lo primero que hizo fue visitar la tumba de Carlos Gardel para dejar una placa y un inmenso ramo de flores. Auténtico embajador de la cultura, fue el guía de Jorge Luis Borges cuando el autor de El Aleph, estuvo en Japón.
El tango en Japón es y fue nuestro más distinguido representante diplomático. Aquella noche de noviembre de 1954 cuando Tadeo Takahashi presenta en el teatro Michi Geki de Tokio a Juan Canaro, se inicia la apertura de los grandes embajadores del tango en tierra oriental. En 1961 el presidente Arturo Frondizi llega a Japón acompañado de la orquesta de Francisco Canaro. Después no faltó nadie; desde los mejores a los más chantas. Todos viajaron a Japón y conquistaron fama, afectos y plata. La única ausencia significativa fue la de Aníbal Troilo. “Para qué voy a ir a Japón si allí no conozco a nadie”, dicen que dijo.
Asi se baila el tango en Tokyo

Garúa. En Ginza, distrito elegante y caro de Tokio, garúa. No es casual, entonces, que un tango se insinúe desde el tercer piso de un edificio pequeño, en un callejón donde hay bares semiocultos por cañas de bambú. Fuera de allí, movimiento perpetuo de personas por las tiendas más exclusivas de la ciudad que incluye el desfile por las puertas del tradicional Teatro Nacional de Tokio; puertas adentro, funciona el Argentina Tango Dance. Es un club, salón de baile, de práctica y enseñanza donde asisten los milongueros locales y donde las estilizadas figuras de Yanagido & Natsuki develan los secretos de la danza porteña a un grupo de principiantes japoneses que han sido convocados por el tango. Están tan apasionados como concentrados. Con zapatos brillantes, orillean la pista, escuchan la música, reciben las instrucciones con respeto y las cumplen rigurosamente. Natsuki se desliza hacia el equipo de música y hace girar un cd de D'arienzo. Nuevos abrazos, nuevas miradas.

Así se baila el tango en Japón.

Este es apenas uno de los muchos lugares donde se aprende y se baila tango. Según Hisao Iizuka, vicepresidente de "La academia del tango de Japón", en su país hay más de 70 tanguerías que se distribuyen entre Tokio (Canaro, Garufa, El compadrito) y otras ciudades como Osaka, Kobe, Yokohama, Okinawa, Nagoya, Naha, entre muchas otras. Y por todas ellas han yirado orquestas típicas, cuartetos, tríos, solistas, bailarines, espectáculos. Pero además también existen unas cien asociaciones, clubes, pequeñas comunidades, centros culturales donde se escucha tango y se comparten historias al igual que en muchos lugares comunes e insólitos de Buenos Aires.
Entre los cantantes japoneses que fueron atraídos por el tango merece un capítulo muy especial Ranko Fujisawa, a quien conocí la tarde del 12 de febrero de 1980, en el café “Ten Roses” de Tokio. Durante aquel encuentro, mientras tomábamos el té, Ranko me dijo que ése habría de ser el primer reportaje que un argentino le hacía en su país.

Nacida con un nombre que en japonés significa “flor de orquídea en el lago de las glicinas”, se dedicó al estudio de canto y piano hasta los 18 años, ya que sus padres querían que fuese cantante lírica.

Durante la guerra tuvo que huir con su familia a Manchuria. A su regreso, una vez firmada la paz, los Fujisawa debieron afrontar tiempos difíciles, de verdadera miseria.

«Comencé entonces a trabajar en un club americano, donde cantaba clásico, pero lo que ganaba apenas me alcanzaba para comer. De modo que empecé a incursionar en otros géneros musicales: canciones populares japonesas, jazz y algunos temas hawaianos. Al cumplir los 24 años ya había incluido en mi repertorio algunas melodías de tangos europeos. Pero recién fui ganada por el tango argentino cuando escuché por primera vez “La cumparsita”, interpretada por la Orquesta Típica Tokio. Después de sentir una profunda emoción, decidí que debía cantar esa música».

Ranko se vinculó entonces con Masahico Takayama, un importante coleccionista de tangos y autor de dos libros sobre el tema, quien le hizo escuchar discos de Azucena Maizani, Mercedes Simone, Ada Falcón, Libertad Lamarque, Hugo del Carril y Carlos Gardel.

«Para poder lograr la verdadera entonación del tango argentino estudié, en un principio, con Jorge Minoru Matoba, un especialista en música latinoamericana y sobre todo en tango».

En esos tiempos, en que aún canta en una orquesta que incluye en su repertorio, preferentemente, melodías europeas, Ranko se casa con Shimpei Hayakawa, director de la Orquesta Típica Tokio, quien no tardará en incorporarla en su orquesta para que cante tangos en castellano.

«El primer tango que canté fue “Caminito”». Según me cuenta Matoba, cantó acompañada por la orquesta que dirigía su esposo, en 1948, a bordo de una fragata argentina. «Terminada la gran guerra mundial, el Supremo Comando del general Mac Arthur en Japón, para mantener el orden público abasteció a Japón de alimentos gratuitos, y entre los países extranjeros, fue la marina de guerra argentina la primera en acudir con dos transportes de trigo, cargados a pleno. Para agasajar a los oficiales de la tripulación se celebró entonces una reunión campestre en la residencia oficial del gobernador de la Prefectura de Kanagawa.