Dandy Producciones ha programado tres galas de lujo a realizarse en el Auditorio mayor de la Biblioteca, Av. Colón 31 1º piso, los próximos viernes 19 de abril, 12 de julio y 23 de agosto. Numerosos artistas locales se han sumado desinteresadamente a este proyecto ofreciendo su talento a cambio de la sola satisfacción de ayudar a una institución cara a los sentimientos de los bahienses que necesita la ayuda de la comunidad. El Instituto Cultural de Bahía Blanca y empresas privadas locales prestarán también su
colaboración para que este proyecto pueda concretarse.
En todos los casos y con el objetivo de promulgar espectáculos popularmente accesibles, la entrada general tendrá un valor de $50; $40 para asociados, y aquellos que se asocien al momento de retirar su entrada podrán adquirirla a $30 junto al valor de la primera cuota social.
MUJERES QUE HICIERON HISTORIA EN EL TANGO
El día 19 de Abril a las 21 hs se ofrecerá el espectáculo "Mujeres que hicieron historia en el tango", un recorrido por las cancionistas memorables
de la música ciudadana que será ofrecido por las cantantes: Gaby "La voz
sensual del Tango", Florencia Albanesi, Susana Matilla y Rosana Soler, los
pianistas Gisela Gregori y Sergio Giustini , la bailarina de danzas
españolas Cristina Fuertes y la conducción de Paola Marco.
En un espectáculo que deleitará y conmoverá al público, las artistas
bahienses evocarán a Mercedes Simone, Azucena Maizani, Libertad Lamarque,
Su verdadero
nombre era Francisco Antonio Loiácono y por su forma particular de caminar los
amigos lo llamaban "Barquinazo", apodo que el mismo Loiácono acortó
luego a "Barquina". Fue partícipe fundamental del grupo de amigos que
logró recomponer la amistad entre Gardel y el también famoso "Carlos de la
Púa".
Le escribieron dos grandes un tango, Aníbal Troilo y Cátulo Castillo, se llama "A Homero" y, como
su título lo indica, está dedicado a quien fuera considerado por muchos como el
más conspicuo integrante del Parnaso de nuestra música más popular, Homero
Manzi, santiagueño de origen y porteño por adopción.
En sus
estrofas se menciona a varios personajes de los cuales uno resulta
prácticamente desconocido para casi todos los oyentes, por muy devotos del
tango que fuesen, cuando dice:
Vamos, vení
de nuevo a las doce.../ Vamos, que está esperando Barquina...
Vamos ¿no
ves que Pepe esta noche,/ no ves que el Viejo esta noche no va a faltar a la
cita....
Pepe y el
Viejo se refieren a José Razzano, el muy conocido uruguayo que hacía la primera
voz en el dúo con nuestro Carlos Gardel. Pero ¿quién era ese Barquina cuya
personalidad muy pocos iniciados conocen?.
Estando poco
tiempo atrás en Córdoba encontré un trabajo al respecto que me aclaró estos
aspectos, al menos para mí desconocidos.
Barquina fue
en su momento uno de aquellos personajes que caracterizaron a la singular fauna
de los comienzos de la historia del tango, ambiente tan bien tratado por Borges
en varias de sus obras más conocidas. Su verdadero nombre era Francisco Antonio
Loiácono y por su forma particular de caminar los amigos lo llamaban
"Barquinazo", apodo que el mismo Loiácono acortó luego a
"Barquina".
Fue
partícipe fundamental del grupo de amigos que logró recomponer la amistad entre
Gardel y el también famoso "Carlos de la Púa", disgustados a raíz de
un comentario negativo que este había escrito cuando el Zorzal cantó una
canzoneta en pésimo italiano, artículo periodístico que su autor tituló
"¡Largá la mandolina, Carlitos!".
DOS TANGOS
MUY CONOCIDOS
También fue
Loiácono el autor de las letras de dos tangos muy conocidos, "El cantor de
mi barrio" y "N. P.", grabados por Troilo con la voz del
"Polaco" el primero, y el otro con Raúl Berón.
Petit de
Murat menciona en "La noche de mi ciudad" (Editorial Emecé, Buenos
Aires, 1979) que en cierta oportunidad el popular Barquina conoció al entonces
Coronel Juan D. Perón y, con su habitual desparpajo le dijo "...si a Ud.
no le diera por la política, ¡qué cuadro con las minas!, con su pinta
trabajarían para Ud. más de las que tuvo el Gallego Julio" (este
"Gallego Julio" era uno de los más famosos delincuentes que actuaban
de guardaespaldas de los caudillos políticos de Avellaneda y La Plata, en las
décadas del 20 al 40).
Es que el
tal "Barquina", un "gomía" muy querido por su carácter tan
desinhibido, no alcanzaba a reconocer las barreras convencionales en el trato
con las demás personas, por importantes que estas fueran, las que al final
terminaban conquistada por su insólita espontaneidad. No hay dudas de que fue
una figura singular que Castillo y Troilo hicieron pasar a la inmortalidad en
su homenaje al gran Homero Manzi, como un integrante más de esa pintoresca
barra de bohemios y soñadores que alcanzaron a crearse un mundo propio al ritmo
del dos por cuatro, hoy reconocido en todo el mundo como la más representativa
música popular argentina.
El viernes 12 de este mes Pergamino, por intermedio e idea de su Concejo Deliberante, cubrirá una vieja deuda que tiene con sus nativos. Simplemente designará como “pergaminense sobresaliente” a José Luis Motta por “su destacada trayectoria artística profesional, que trascendió ampliamente las fronteras de nuestra ciudad y se convirtió en un claro ejemplo para las futuras generaciones”, según se declara en los fundamentos esenciales de la propuesta.
Con un currílucum tan extenso como valorable, Pepe realmente trascendió los límites de nuestro país. Fue director artístico de varios canales de alcance nacional, miembro de la Sociedad Argentina de Autores y Compositores de Música, miembro de la Asociación Argentina de Profesores de Música, profesor de la Cátedra Avanzada de Piano en la Academia Nacional del Tango, dependiente del Ministerio de Cultura y Educación de la Nación.
Paralelamente, intervino en muchísimos programas de televisión, entre los que se destacan -por su popularidad- Almorzando con Mirtha Legrand; Por siempre Chaplin, realizó improvisaciones en piano para las películas mudas de Charles Chaplin, con el periodista Claudio España, por ATC; Amor prohibido, Tu mundo y el mío, El jardín de los cerezos, para Canal 13, obra puesta por el Centro Cultural del Teatro San Martín, Esta tarde, El espejo, Hiperhumor, Cordialmente, Estudio abierto, Café con Canela, Cuentos y Novelas, Telejuegos, Con cierta...sonrisa, Zoom, La república de los niños, Que se vengan los chicos, Chicas y chicos, Este es el tango y el popular Grandes valores del tango.
Ejecutante, compositor y arreglador musical en varias películas y obras de teatro, Pepe se ganó un excepcional lugar entre los músicos argentinos y ocupó lugares de alta estima entre sus iguales en varios lugares del mundo, como lo marcan sus pasos por Estados Unidos (fundamentalmente en Las Vegas, donde residió), y en Europa, donde también puso su firma e impuso su estilo.
Es así que los concejales Omar Pacini y Lucio Tezón no dudaron en presentar un proyecto de resolución para declararlo, como está dicho, un “pergaminense sobresaliente”. El Concejo aceptaría la propuesta en su sesión de mañana y Pepe Motta será agasajado por Pergamino el viernes 12 en los altos del Municipio.
Es allí donde el mismísimo Pepe aprovechará para brindar a los presentes un recital especial, junto a su quinteto, integrado -además del maestro- por Humberto Ridolfi (violín), Ruben Jurado (viola), Nicolás Enrich (bandoneón) y Pablo Motta, su hijo, (contrabajo).
El repertorio de este recital de agradecimiento incluirá a “Francisco” (Pepe Motta) un solo de piano, “Un bello recuerdo (de mi infancia)” (Pepe Motta), Contra viento y marea (Pepe Motta), Soñando Buenos Aires (Pepe Motta) y Después que te fuiste (Pepe Motta), todos en quinteto.
El reconocimiento y luego recital del artista comenzará a las 20:00.
Espectáculo transmitido en directo a todo el mundo por www.troilo.com.ar
Los CD de Pepe
Como en una especie de agradecimiento, el mismo artista cedió a dos instituciones locales 200 copias de su último compacto para que los vendieran en su favor. Es así que la Escuela Nº 503 y el Grupo GAE, entidades elegidas, estarán también en la sesión especial del viernes 12 para que el público asistente pueda favorecerlos con su compra.
La reparación histórica del Señor del Tango encuentra cerrado su
círculo: libro biográfico, nuevo monumento en la Plaza del Tango de Bahía
Blanca, cita infaltable cada 07 de enero en la esquina del que fuera su nido gaucho (frente al busto que lo
inmortalizó en H. Yrigoyen y 12 de octubre), Festival Nacional de Tango con su
nombre, permanencia en los salones de baile, reaparición en los medios masivos
de comunicación y, ahora, documental sobre su vida y obra.
Una vez más, el maestro bahiense
logró conmover los corazones de sus admiradores y simpatizantes, pero esta vez
no fue sólo con su música sino también con imágenes, palabras, recreaciones de
época, evocaciones realizadas a modo de homenaje en los último años y hasta su
propia voz plasmadas en un excelente documental realizado por Alberto
Freinquel.
Anoche, a las 20 hs se estrenó el
documental “CARLOS DI SARLI, EL SEÑOR DEL TANGO” en el Teatro Municipal de
Bahía Blanca, a sala llena, con entrada libre y gratuita. Sorprendía ver la
cantidad de público joven en la platea que, por amor a la danza (tan
característica de la música del maestro), por curiosidad o por interés temprano
en las raíces musicales del país y la historia de la ciudad se acercaron a
disfrutar de esta historia de vida.
La apertura fue brindada por una
locutora oficial que agradeció a las empresas intervinientes en el proyecto
producido por José Valle y Néstor Bacega, al público presente y a las
instituciones gubernamentales que apoyaron el emprendimiento. Además hizo
lectura de una carta enviada por María Amelia Gómez de DI Sarli donde la viuda
del maestro explicó los motivos de su ausencia y agradeció profundamente la
labor realizada con la imagen y el recuerdo de su esposo por parte de los realizadores.
Seguidamente, tomó la palabra
Sergio Raimondi, Director del Instituto Cultural de Bahía Blanca, quien destacó
el intenso trabajo del cineasta, expresó su alegría porque el estreno tuviera
lugar en el marco de los festejos de los 185 años de Bahía Blanca y concluyó su
discurso afirmando que las concepciones y los dichos sobre las ciudades no son
inocentes, refiriendo al mote de “mufa” del que fue víctima el músico y consecuentemente
la ciudad. “Que estemos hoy reunidos aquí nombrando a Carlos Di Sarli con todas
las letras como debe ser, demuestra que los bahienses queremos nuevas
historias”.
Esta conclusión dio entrada al
director del documental, Alberto Freinquel, quien en un extenso discurso
agradeció a todos los colaboradores del film e hizo un recorrido por el trabajo
realizado desde el comienzo de la idea surgida del Dr. Eduardo Giorlandini en
conversaciones con Bacega hasta la edición final con todos sus entremeses,
dificultades y voluntades.
La proyección realizada por
Miguel Ángel Thome duró 63 minutos, tiempo durante el cual el teatro en pleno
mantuvo absoluto silencio y atención sobre la pantalla suspendida a metros del
escenario. El cierre del audiovisual desprendió en los presentes lágrimas,
emoción y un aplauso fervoroso y duradero que volvió a repetirse al final de
los títulos.
Comentarios: muchos y todos
buenos. Los concurrentes salieron “llenos” de la sala, con sus expectativas
satisfechas por demás y agradecidos por el recuerdo y la reparación histórica
realizada durante estos años por Dandy Producciones, completada magistralmente
por Freinquel, Giorlandini, Bacega y colaboradores.
Tiempos en que el sonido de la radio ganaba la calle a través de ventanas y balcones con flores o de una enredadera de campanillas colgando de alambrados oxidados. Baldosas y ladrillos, asfalto y tierra, luces y sombras plenas de goces juveniles, de esperanzas, de sueños y del andar pausado de quien regresaba del trabajo a su casa; en tanto, allá lejos, otros muchos colmaban un "trocen" que olía a suburbio. Para entonces la pasión por el tango había ganado la calle, las confiterías, los salones y los clubes de barrio. Todo era tango y así los ejecutivos de las radios buscaban ocupar sus programas con esta música. En la lucha por ese predominio estaban: Radio Belgrano, Splendid y El Mundo. Fue precisamente esta última la que tomó la delantera, incluyendo en su programación la hoy legendaria "Ronda de Ases", audición que marcó el apogeo en el éter, de las orquestas típicas y sus cantores. Se emitía desde la sala del Teatro Casino y desfilaron por ella nombres como Tanturi-Castillo, D'Agostino-Vargas, Di Sarli-Rufino, D'Arienzo-Mauré, Fresedo-Serpa y Troilo-Fiorentino, todas yuntas bravas que convocaban a los tangueros convertidos en hinchas fanáticos de la orquesta de su preferencia y con la cual se identificaban plenamente. La locución del programa estaba a cargo del inolvidable Jaime Font Saravia, secundado por Juan José Piñeiro, con libretos esbozados por Barreiros Bazán. Con menor arrastre, pero con gran calidad interpretativa, intervinieron también en el programa, las orquestas de Alberto Soifer y Edgardo Donato. Recuerdo que en la etapa inicial de "Ronda de Ases", Troilo presentó el primer arreglo que para él hiciera Astor Piazzolla, la milonga "Azabache", de Enrique Francini y Homero Expósito. En ese certamen "Pichuco" se alzó con el primer puesto. "Ronda de Ases" continuó irradiándose por mucho tiempo, adoptando otros nombres alternativos, como "Esquinas de mi ciudad" y "Casino", manteniendo siempre la alta calidad de sus protagonistas. En ese tiempo, Buenos Aires transpiraba tango y otras formaciones -Miguel Caló, Domingo Federico, Alfredo De Angelis, Osvaldo Pugliese- colmaban con su música las ondas de una radiotelefonía que había ganado un lugar de privilegio en los hogares argentinos.
Durante el año 1945, Radio Belgrano, dispuesta siempre a dar batalla para superar la supremacía de Radio El Mundo, lanzó con el auspicio de la Compañía Argentina Sydney Ross S.A. un programa titulado "La voz triunfadora en el Cancionero Glostora: Alberto Castillo", que se irradiaba los días martes y jueves a las 21.30 horas y en el que se incluía un espacio de deporte con el nombre "El deportivo para la juventud triunfadora, con el comentarista Enzo Ardigó". Era evidente el propósito de los patrocinantes, de apuntar a la conquista del mercado de los jóvenes -para el fijador Glostora-, aprovechando el arraigo del tango en la juventud. Se vivía para entonces -sin saberlo- las víspera de un suceso que muy pronto se instalaría, por muchos años, en Argentina y en otros países hermanos. Lamentablemente, no quedan archivos que permitan bucear con mayor exactitud ese tiempo de tango y poesía, pero apoyado en una memoria nostálgica que no me abandona, es que me atrevo a incursionar en esta evocación. En el diario "El Mundo" del lunes 1º de abril de 1946, puede leerse un importante aviso dando cuenta de la presentación, a las 20 horas de ese día, del maestro Alfredo De Angelis y sus cantores Carlos Dante y Julio Martel en un nuevo programa: "El Glostora Tango Club", dedicado "a la juventud triunfadora", un espacio de 15 minutos en el cual "El fijador del gran mundo, al alcance de todo el mundo", presentaba a su "astro exclusivo para la radiofonía argentina". Para mejor ubicarnos en el tiempo aquel, conviene recordar que ese mismo día las noticias periodísticas anunciaban la reaparición en el Palacio del Baile de Parque Retiro, de la orquesta de Pedro Maffia y, en la calle Lavalle 892, la reapertura de la Confitería Nobel, con la actuación de las orquestas de Alfredo De Angelis y de Héctor Lagnafietta y la participación, en carácter de invitados, de Ricardo Tanturi, Osvaldo Donato, Roberto Quiroga, Barry Moral, la Hawaiian California y del poeta Héctor Gagliardi. Pensar que todo esto sucedía un día lunes en solamente dos reductos nocturnos, lo cual permite suponer sin errarle, de las extraordinarias maratones de música, baile y algo más, que poblaban la noche porteña.
Pero volvamos al 1ª de abril de 1946 y reparemos en la programación que Radio El Mundo ofreció ese día, en los momentos previos al esperado debut del "Glostora Tango Club". Después del noticioso de las seis de la tarde, Raúl Galván entonó canciones melódicas y a continuación, don Atahualpa Yupanqui nos regaló música del altiplano. Después siguieron Washington Bertolín y su ritmo sincopado, Bina Butti cantando canciones napolitanas, noticias de automovilismo, Alberto Rodríguez en "Bailes criollos" y Ortega del Cerro en "Canción de Barrio", “El boletín sintético de Radio El Mundo”, luego boleros con Gladys Marvel y a las 19.45 horas, el inefable "Peter Fox lo sabía", radiante preludio de lo que vendría poco minutos después. Se escuchó entonces el ansiado "top" de las 20 horas y, como estaba previsto, se alzó el imaginario telón del micro de 15 minutos que sería por años el más popular éxito de la radio. Las voces de Rafael Díaz Gallardo y Lucía Marcó anunciaron "El Glostora Tango Club, la cita obligada de la juventud triunfadora", con la participación de la orquesta de Alfredo De Angelis y sus cantores Carlos Dante y Julio Martel. Según un tanguero memorioso, Juan Carlos Jusem, la primera interpretación de la orquesta, con la voz de Dante, fue el tango "Carnaval" de Aieta y García Jiménez. ¿Sos vos, pebeta? ¿Sos vos? ¿Cómo te va? ¿Estás de baile? ¿Con quién? ¡Con un bacán! ¡Tan bien vestida, das el golpe!... Te lo digo de verdad. Así nació por LR1 Radio El Mundo y la "Cadena Azul y Blanca" un programa de tangos, verdadero mito de excelencia y de calor popular. Un referente indiscutido, una bisagra en el tiempo, que marcó para siempre a quienes tuvimos la dicha de ser activos testigos de la preeminencia de la canción ciudadana sobre cualquier otra expresión. Si bien podría poner aquí fin a lo que fue aquella antológica presentación, no resisto enumerar cuanto sucedió después. La emisora continuó con "Angelito y Saturnino, dos piratas argentinos", con Osvaldo Canónico y Tincho Zabala. A las 20.35 se presentó "La Alegre Cabalgata Palmolive" y media hora después lo hizo la orquesta típica del maestro Ricardo Tanturi, con la voz de Enrique Campos y la Hawaiian Serenaders. Bien podría decirse que ya teníamos "cartón lleno", pero no fue así, a continuación, Augusto Codecá y Aníbal Troilo con Alberto Marino y Floreal Ruiz, enriquecieron los 30 minutos de humor y tango previos al “Radioteatro de la Noche”, presentado por Julio César Barton. Imperturbable prosiguió el éxito del "Glostora Tango Club" y por largo tiempo ese nombre y el del maestro De Angelis se convirtieron en sinónimo de tango. Transcurrieron muchos años en los que la orquesta y sus cantores Carlos Dante y Julio Martel primero y, una vez desvinculado éste en 1951, Oscar Larroca, constituyeron la razón del éxito del popular ciclo de las 20 horas, en el siempre colmado auditorio de Radio El Mundo. En algunas oportunidades, por compromisos de la orquesta, las actuaciones de De Angelis se alternaron con las formaciones de otros directores, pero él siempre volvía al "Glostora". En sus continuos regresos, se fueron incorporando las voces de Juan Carlos Godoy, Roberto Florio, Lalo Martel, Roberto Mancini, Carlos Aguirre y Alberto Cuello. Varias fueron las orquestas típicas que se sucedieron en el programa, a partir de 1951, todas de primer nivel. Entre ellas recuerdo las de Francisco Canaro, Ricardo Tanturi, Miguel Caló, Juan Sánchez Gorio, Juan D'Arienzo, Héctor Varela, José Basso, Armando Pontier, Alfredo Gobbi, Enrique Mario Francini, Rodolfo Biagi, Osvaldo Pugliese, Donato Racciatti, y Jorge Arduh, único sobreviviente de esa constelación de estrellas y que hoy, desde su Córdoba natal, recuerda que su última interpretación en ese espacio, allá por el año 1964, fue "La cumparsita". Repito, "El Glostora Tango Club" marcó un hito en la radiofonía argentina y nos remite a una época donde la nostalgia se asocia con otros programas inolvidables: "Qué pareja", con Héctor Maselli y Blanquita Santos, auspiciado por el jabón en polvo Rinso, "Peter Fox lo sabía", con José Tresenza y "Los Pérez García", con Martín Zabalúa, Sara Prósperi, Celia Juárez y Jorge Norton. Todos coexistieron con "El Glostora Tango Club" entre las 19.30 y 20.30 horas. Fueron veintidós años de permanencia en el éter, como se decía entonces, en los que el maestro De Angelis fue el "cadenero" de una página de oro de la historia de la radio y del tango. El paso del tiempo y el auge de la televisión fueron relegando a la radio. Como una luz que se apaga lentamente, casi al final de la década del sesenta, "El Glostora Tango Club" se perdió para siempre e ingresó en la zona gris de los recuerdos. Así se fue, recostado en el viejo paredón del barrio sur, en busca del "primer rayo del día", cual "Rosicler", que se agiganta en la voz de Julio Martel y nos dice: La vida es este río que me arrastra en su corriente blando y yacente, lívida imagen, de vuelta ya de todos los nostálgicos paisajes, muerta la fe, marchita la ilusión... Atrás quedaron para siempre tantos agradables momentos vividos al amparo de ese ciclo, con la figura imborrable del maestro De Angelis. Nostalgias de barrio perdido, aquel en que flotaba el tango y, sus sones se esparcían sobre las sombras, se enredaban con la ronda del "botón" y se iban a dormir su sueño de amor en la vieja calesita. Y evocando a Homero, digo: "Fueron años de cercos y glicinas, de la vida en "orsay", del tiempo loco."
Vino al mundo en el porteño barrio de Liniers, zona que creció al amparo de la instalación de los talleres del antiguo Ferrocarril Oeste. Nació en la calle Pola 429 y dio sus primeros pasos en veredas poblada de plátanos que apenas dejaban ver el cielo. Realizó sus estudios primarios en la Escuela Nº 8 del Distrito Escolar Nº 20, habiendo cursado luego estudios secundarios.
Desde muy joven, borroneó papeles con composiciones que extraía de su observación de la realidad, de la calle y de sus sueños juveniles. Dice su hermana Albina que Reinaldo, desde chico, "tuvo alma de bohemio".
Su padre, de nombre Ernesto y de nacionalidad uruguaya, era obrero ferroviario, en tanto su madre, doña Concepción Ridaura, era una española nacida en Málaga, que se ocupaba de los quehaceres de la casa. El matrimonio tuvo seis hijos, tres mujeres y tres varones, siendo Reinaldo el menor de todos.
Yiso nunca se apartó de sus amigos de barrio y andanzas. Con ellos frecuentó la esquina de su casa natal y la plaza Coronel Martín Irigoyen, más conocida por la plaza "de Founrouge". Fue precisamente en esos lugares donde se gestó "Oeste Argentino", equipo de fútbol de barrio, donde Reinaldo y sus amigos daban rienda suelta a su pasión por ese deporte. También militó en distintas divisiones del Club Atlético Vélez Sársfield, llegando a integrar el equipo de segunda división de esa entidad, pero la quebradura de una de sus piernas tronchó la esperanza que él tenía de llegar a jugar en primera; razones tenía para pretenderlo, pues según referencias recogidas, era un excelente jugador de fútbol.
Reinaldo Yiso fue fiel a su barrio y nunca abandonó Liniers. Viajaba diariamente al centro de la ciudad, con el fin de atender sus intereses autorales, sin descuidar por ello sus otros compromisos laborales. Si bien comenzó a trabajar en el Frigorífico Lisandro de la Torre como obrero de planta, luego fue transferido a la parte administrativa, donde llegó a ocupar un alto cargo. Tiempo después, se desempeñó como director de Magenta Discos.
En el año 1941 el maestro Ricardo Tanturi le estrena su primer título, "Por eso canto yo"; si bien es en 1943 cuando Reinaldo Yiso alcanza notoriedad con el tango "El sueño del pibe", grabado ese año por Osvaldo Pugliese con la voz de su amigo y vecino, Roberto Chanel. La temática futbolera abordada en este tango, hace que su letra alcance gran difusión y popularidad. Es en "El sueño del pibe", donde el autor rememora los propios momentos de felicidad e ilusión, vividos durante su juventud.
Para ese entonces Yiso, además de escribir y trabajar, presentaba en los bailes a la orquesta de Osvaldo Pugliese, tarea por la cual recibía una remuneración de cinco pesos por cada noche de actuación. Fue precisamente durante esos años cuando una tarde, al cruzar la calle junto a Chanel y Morán, lo atropelló un auto, provocándole serias lesiones que lo mantuvieron postrado durante más de un mes.
Escribió gran cantidad de tangos de carácter descriptivos, empleando versos sencillos, ya que nunca recurrió a la metáfora para adornar sus temas. La mayoría de sus letras plasmaron sentimientos propios o extraños, como así también algunas otras, reflejaron pasiones y controversias populares. Tal el caso de "Bolero", tango que muestra el enfrentamiento que en ese momento mantenían dos géneros musicales, el tango y el bolero; en tanto en "Bailemos", describe la angustia que siente una pareja frente al hecho irreversible de la separación. Todas las letras de Yiso encierran, verdaderas pinceladas de la vida.
Además de los temas ya mencionados, sus tangos más difundidos fueron "Un infierno", "Soñemos", "Cuatro líneas para el cielo", "Un regalo de reyes", "El hipo" , "Cómo le digo a la vieja", "Una carta para Italia", "Un tango para mi vieja", "La número cinco" , "El tango es una historia", "Estas cosas de la vida", "La mascota del barrio" , "Un tormento" , "El clavelito", "Susanita" y "Un vals para mamá". Este tema Yiso lo compuso una noche en que cuidaba a su madre, víctima de una afección circunstancial. En uno de sus versos el autor refleja cual era su estado emocional en ese momento, al decir que ese vals "Surgió una noche de esas que más pensaba en ella".
Musicalizaron sus letras, entre otros, Ricardo Tanturi, Francisco Rotundo, Miguel Caló, Anselmo Aieta, el ya citado Enrique Alessio, Pascual Mamone, Santos Lipesker, Arturo Galluci, Abel Aznar, Edgardo Donato, Roberto Chanel, Alberto Morán, Roberto Rufino y Alberto Podestá, Juan Puey, Roberto Caló, Oreste Cufaro, Ángel Cabral, Juan Pomati, Manuel Mañueco y Erma Suárez.
El 22 de mayo de 1943 se casa con Sara Rainer, con quien tuvo dos hijos: Marta y Ricardo, a los que Yiso nombra en su tango "Un regalo de reyes". Según cuenta su esposa, el nombre con el cual fuera anotado en el Registro Civil su hijo varón, responde al deseo de la pareja de homenajear al maestro Ricardo Tanturi.
Varias de las composiciones de Yiso fueron registradas a nombre de su mujer, tal el caso de "Bien Bohemio", tema que con música de Tití Rossi y Juan Pomati, fue grabado por la orquesta de Francisco Rotundo con la voz de Julio Sosa. ¿Quién no recuerda ese verso que dice: "Estoy en Pampa y la vía como viola en el empeño"? También, con el nombre de Sara Reiner, registró otros tangos, entre ellos: "Ruiseñor de Puente Alsina" y "Pifia", y con el seudónimo de Rianco, firmó la letra de "No me esperes esta noche", obra popularizada por la cancionista María Graña.
A su vez, compuso diversos valses peruanos, entre otros, "He visto llorar a Dios", "Errante vagabundo" y "Desagradecida".
Su aporte al tango quedó reflejado en la gran cantidad de composiciones que escribió, sin apartarse nunca de un particular estilo de poeta de barrio. Sus letras resumen emociones y pasiones comunes a la sensibilidad del porteño.
Para finalizar esta semblanza de Reinaldo Yiso, nada mejor que evocar un verso de su tango "Un infierno", precisamente aquél que dice: "en tu pelo soy abrojo que pretende ser clavel", frase que se hizo garra en la voz de Floreal Ruiz.
Según constancias obrantes en Sadaic, Yiso registró 532 obras, de las que 143 son inéditas, 114 fueron editadas, 109 grabadas y 166 editadas y grabadas.
El sábado 13 de Abril a las 22 hs
se realizará el segundo encuentro del ciclo de tango “Remembranzas” creado por
Dandy Producciones para la ciudad de Bahía Blanca.
Será en la tanguería “El Motivo”
de esta ciudad (Brandsen 550) y contará con la presencia del gran cantor Hernán
Salas, Rosana Soler junto a Sergio Giustini y Omar Olea con la pianista Gisela
Gregori.
HERNÁN SALAS es dueño de una voz
potente, con registro de barítono, y todo el "yeite" del tango,
prototipo del muchacho porteño. Con muy buena voz y afinado, transmite con
buena dicción y carisma.
Nació en el Barrio Porteño de
Floresta, un 4 de octubre de 1965. Con apenas 8 años de edad surge la
posibilidad de integrar el programa “El Tango del Millón”, el cual se emitía
por el viejo Canal 11 (hoy TELEFE), conducido por el querido Juan Carlos
Mareco.
Debuta un 11 de Noviembre de
1973, acompañado por los maestros Leopoldo Federico, Carlos Marzán y Roberto
Grela.
Comienza así una carrera que
incluyó compartir sets televisivos con figuras de la talla de Roberto Rufino,
Argentino Ledesma, Edmundo Rivero, Enrique Dumas, Beba Bidart, Jorge Valdez,
Armando Laborde, Jorge Sobral, María Graña, etc.
Formo parte del elenco estable
del programa “Copetín de Tango”, que se emitió durante el año 2005 por el Canal
26. Asimismo, participó de programas televisivos como “Casino Show
Internacional”; “Aguante tango”, “Tangueando en la zona Sur” y “Tiempo
Provincial”.
En el año 2004, graba su CD
llamado “Creciendo”, con el acompañamiento del cuarteto del Maestro Ricardo
Cieri.
Actualmente actúa en las
principales casas de tango de Capital Federal y realiza constantes giras por
todo el país.
OMAR OLEA es un gran cantor de
tangos y actor que derrocha simpatía en cualquier ámbito que se presente. Sus
interpretaciones traen a la memoria al querido Jorge Valdez, con voz clara,
dulce y excelente afinación. Cada actuación de Olea deja hermosas
interpretaciones de piezas clásicas que todo tanguero quiere volver a escuchar
con cuotas graciosas en sus comentarios y hondo sentir al cantar.
Es un artista completo y no
reconocido suficientemente en la ciudad y el país, por eso Dandy Producciones
lo ha sumado a cada uno de sus proyectos
tangueros.
Además de sus numerosas
actuaciones en la ciudad y la zona, Olea fue protagonista de la Gala de Cierre del 2º
Festival Nacional de Tango "Carlos Di Sarli" de Bahía Blanca por su
talento e incondicional predisposición cuando se trata de trabajar con vocación.
ROSANA SOLER es una
experimentada cantante whitense que con gran ternura sabe poner al tango la
fortaleza necesaria del género.
Con interesante fraseo, bello timbre vocal y
una paz que se trasmite involuntariamente, Rosana dice la música ciudadana con
propiedad. Música que compartió desde muy jovencita con el maestro Hugo Marozzi
quien la conservó durante años entre las mejores voces de su elenco. Ella fue
la encargada de estrenar numerosos tangos del bandoneonista platense como:
“Nuevamente” y “Programa de radio”, dedicado al reconocido Gustavo Gabí.
Hoy, habiendo capitalizado la
experiencia de los años y el amor al tango que viene con el tiempo, Soler se
sitúa entre las mejores intérpretes de la ciudad.
El cantor Omar Olea será
acompañado por la pianista GISELA GREGORI, joven bahiense que ingresó al Conservatorio
de Música de Bahía Blanca a los 10 años para no abandonar jamás los estudios y
el perfeccionamiento. En 2002 Gisela fue convocada por el Maestro Mario Grossi
para formar un trío, junto al cantante Pablo Gibelli, llamado “Miscelánea Trío”,
de repertorio variado, y luego su cuarteto de tango donde este género entró
definitivamente en su vida. Actualmente integra el cuarteto “Chiqué Tango”.
Por su parte, Rosana Soler será
acompañada también en piano por SERGIO GIUSTINI, de vasta trayectoria en Bahía
Blanca y la región que ha recorrido con su piano todos los escenarios del sur
argentino, acompañando a artistas de primer nivel y variados géneros musicales.
Actualmente, Sergio conforma la banda musical de Las Carabonas (dúo folklórico)
y acompaña a cantantes de tango siendo su dupla ideal la que realiza con Rosana
Soler.